El auge de las PYMES no se detiene. Cada vez más emprendedores deciden saltar la barrera y formalizar una pequeña o mediana empresa con las implicaciones del caso. Eso se traduce de dos formas: más oferta, pero la misma demanda.
El auge de las PYMES no se detiene. Cada vez más emprendedores deciden saltar la barrera y formalizar una pequeña o mediana empresa con las implicaciones del caso. Eso se traduce de dos formas: más oferta, pero la misma demanda.